El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó este jueves un decreto para compensar los daños a Rusia y al Banco Central del país por las acciones de EE.UU. al confiscar sus bienes.
El mandatario ordenó de esta manera establecer un procedimiento especial para contrarrestar las acciones hostiles de Washington, que congelaron activos rusos en el exterior. Entre otras medidas, permitió el uso de propiedades de EE.UU. en Rusia.
Asimismo, Putin estableció que un propietario de activos confiscados puede imponer una demanda bajo las leyes rusas para definir “la incautación ilegal de bienes” por parte de EE.UU.
Cuando un tribunal acepte la solicitud, pedirá a la Comisión de Control de Inversiones Extranjeras del Gobierno una lista de las propiedades de EE.UU. en Rusia. A continuación, la Comisión identificará los bienes de Washington que, “teniendo en cuenta el principio de proporcionalidad, pueden utilizarse para compensar los daños”.
El decreto de Putin se da luego de que el mes pasado, la Cámara de Representantes de EE.UU. votó a favor del proyecto de ley que aprueba la confiscación de los activos rusos congelados en favor de Ucrania, lo que fue calificado por el Kremlin de “directamente un robo”.
Dmitri Peskov, portavoz presidencial ruso, declaró por su parte que la confiscación de activos rusos será “un clavo sólido en el ataúd futuro de todo el sistema económico occidental de coordenadas”, y sostuvo que Moscú “perseguirá legalmente a todos aquellos que están involucrados en tales decisiones y en su implementación”.
